Como ya viene siendo tradición –este es el 3º año- hemos compartido un fin de semana de rugby con los amigos ingleses del Chipping Norton RUFC.Han sido los días del 20 al 22 de marzo.
Unos días intensos de rugby y otras actividades.
Antes de nada, quiero agradecer la colaboración y entusiasmo de:
Las familias del Barça que acogieron familias inglesas. Sin su generosa participación este fin de semana no hubiera sido posible. Voy a citarlas a todas por estricto orden alfabético:
Los Alegría
Los Álvarez
Los Aparicio
Los Bennell
Los Casals
Los Escuder
Los Gerhard
Los Gómez (Carles)
Los Gómez (Joan)
Los Martínez
Los Oviedo
Los Peña
Los Serra
Los Vázquez
Gabi Cairo quien nos facilitó entradas gratuitas para que los de Chipping Norton puedieran realizar el Tour del Camp Nou y visitar el Museu del Barça. Quedaron impresionados por el Estadio y por toda la historia deportiva recogida en el Museu.
Todas las madres que estuvieron preparando calçots (3.000, se dice pronto). A las que preparaban los calçots para la barbacoa y a las que los envolvían para que se mantuvieran calentitos.
Josep Ramon, nuestro sacrificado experto en brasas y barbacoa y proveedor de butifarras y demás chicha.
Ramón Aparicio por encargarse de los suculentos macarrones para los niños. De los postres y , también, de la barbacoa. Y a su padre que organizaba la cola de los niños.
De Félix Álvarez por su indispensable trabajo logístico: campo de Parets, calçots, platos, bebidas, etc.
Carlos Gómez por atender hasta el final la barbacoa.
Sam Bennell, sin cuyo entusiasmo y compromiso nunca se hubiera iniciado esta aventura.
Los amigos de Castelldefels que compartieron con nosotros la mañana de rugby.
Todos los delegados y entrenadores.
Sin todos ellos y sin la voluntad de participar de todos los que asistieron no hubiéramos podido pasar un fin de semana memorable como este.
Fue memorable, sí, por:
La visita al Camp Nou.
Por poder compartir unos días con nuestros colegas ingleses. Ofrecerles nuestras casas, nuestra comida, nuestras ganas de pasarlo bien.
Por ver a los chavales en los entrenos conjuntos del viernes y los partidos del sábado en Parets. Los críos se lo pasaron de miedo –los de Chipping y los del Barça-. Los resultados son lo de menos. Lo importante es la convivencia, el intercambio de camisetas, de emails.
Por la supercalçotada del sábado y ver como los ingleses se reían, se hacían fotos con el babero, se pringaban con los calçots y aprendían a usar el porrón. Por conseguir que de un ‘quilombo’ monumental surgieran una barbacoa inolvidable.
Por poder hablar, reir y bromear con gente aficionada al Rugby como nosotros.
Esperamos poder vernos en breve en Chipping Norton y el año que viene otra vez en Barcelona.
Sólo quiero acabar diciendo que con estas ganas de trabajar de llevar adelante proyectos y de compromiso, la Escuela de Rugby del FC Barcelona tiene una fuerza irresistible.
A fin de cuentas, la escuela está formada por todos los que nos reunimos este épico fin de semana.
Gracias a todos y hasta la próxima